Para cinéfil@s, unha proposta «Regresión», de Amenábar

*Regresión (I)

Acudín ao cine a última hora, aproveitando o horario no que o cansazo do día pode volverse en contra das expectativas postas na fita, que todo hai que dicilo, non eran moitas. Temía encontrarme cunha segunda parte de Los otros, ou alguna trama esotérica sellante. Pero o certo é que me sostiven durante 105 minutos ao asento sen pestanexar.
Unha confluencia de factores, todos afortunados: a base real da historia; o desenvolvemento do guión, que compón unha trama en absoluto predecible, obrigando a cohabitar con ela, a reflexionar, a empatizar coas personaxes e a aborrecelos pasadas unhas poucas secuencias.
Alí estaba Amenábar en estado puro, conseguindo aquilo de nada é o que semella ser.
A trama atenaza as personaxes neses espazos de terror que elas e eles mesmos crean.
Somos as nosas crenzas, as nosas suxestións, creamos fantasmas para poder vivir e acadar os nosos obxectivos. Tal vez aí recae outro dos valores fundamentales da película, que quedará para comentar noutra entrega.
Decateime que tamén eu anticipaba prexuiciosamente o final, integrando o propio test sicolóxico ao que o guionista che somete.
Magnífica Regresión, desde dentro e cunha estética naturalista, con tintes sutís expresionistas e gore; o imprescindible para pincelar un film de suspense, sicolóxico, gótico, negro? Non merece a pena ni sería correcto etiquetalo.
O movemento da cámara, prolongación dos estados de ánimo a impecable iluminación, creando unha atmósfera abafante, etc. cun reparto de altísimo nivel que emana credibilidade por todos os poros.
*Ficha da película Regresión: dirixida por Alejandro Amenábar. Con Ethan Hawke, Emma Watson, Aaron Ashmore, Devon Bostick, David 
Thewis, Dale Dickey, Aaron Abrams, ...
Estrea mundial,Festival de Cine de Donostia, 2 de outubro de 2015.

DE CANDO A CALIGRAFÍA DEVALOU EN POEMA

De cando os obxectos deron en chamarse poemas

Cantas veces, obnubilada polas ópticas do microscopio con que analizo os documentos, imaxino que as letras se liberan do ductus, deixando un ronsel de fíos do papel para emprenden unha vida de seu, fóra do meu Gabinete.


Imaxino nas caligrafías e obxectos poematizados de Pepe Cáccamo, as novas singraduras das miñas pezas de estudo.
Falando de caligrafía, non podo por máis que festexar a nova páxina dun dos poucos artistas integrais que coñecín nesta vida (do Renacemento para acó) ao escritor, escultor, instalador (artístico, non sei se tamén técnico) Pepe Cáccamo.

Benvida a súa páxina chea de enxeños, divertida, fermosa, pensante.

Por veces sinto o guiño do pintor Urbano Lugrís, con estes poemas (invento un nome para esta técnica?) ultrafísicos; porque levan forma, contido, historia, reminiscencias vitais do artista e de toda unha xeración, ou dúas, ou tres

Deixemos a crítica academicista para plumas máis autorizadas. 

Non sabería cal escoller nesa amalgama de humor, coidado e ritmo.

Parabéns deste Gabinete amigo.

Vuelaplumas caligráfico-periciales

Polémica entre la escritura manuscrita y el modelo finés

La escritura manuscrita a debate. El caso finlandés

Si naciéramos ahora y viviésemos en Finlandia, todo quedaría solventado.

Cómo hemos cambiado, y no, no es el título de una canción, me refiero a nuestras destrezas escriturales. Atrás quedaba la caligrafía constante, legible, asentada sobre la línea del renglón, con mayor o menor número de florituras.d5122-puntesdeunviajeaginebra
Ahora, hasta nos cuesta leer lo que escribimos, “qué rayos quise poner aquí!?” me comentan a diario.
Algunas personas se jactan de haber perdido la forma correcta de antaño “por culpa de” los apuntes, a base de años de velocidad y síntesis en las aulas universitarias.
Como si escribir “mal” subiese el caché.
Pongamos de ejemplo la exquisita ininteligibilidad (buff, que palabra!) de la letra de los doctores de toda la vida, sobre todo de los varones. “Ya la enterarán en la farmacia”.
Pero es que el oscurantismo parece añadirles un plus de rigor científico. Como si lo indescifrable pasase automáticamente a considerarse sesudo e inteligente (no sólo pasa con la grafía, pero esto es materia para otro artículo).
Digo doctores de-toda-la vida y me viene a la mente D.Manuel Cendón, que leía las enfermedades -sin esoterismos- en la piel, los ojos, o kinéticamente; y prescribía con su plumín los medicamentos en una limpísima letra caligráfica.
No había nada que ocultar; respondía a un impresionante ojo clínico, privilegio de muy pocos, que envidiamos profundamente el común de los mortales, y que, sin duda, se debe al intenso conocimiento y dedicación a la ciencia.
Y yendo al origen del post: en diciembre del pasado año sonaban todas las alarmas, al menos en nuestro ámbito, al imaginar las impredecibles consecuencias de la desaparición de la escritura manual en el sistema académico finlandés.
Sabemos la preeminencia de las decisiones de los países desarrollados sobre los que estamos a la cola, en este caso, a nivel educativo.

AlfredEl asunto no parece ser como figuraba en los titulares y Minna Harmanen, responsable del Instituto Nacional de Educación finlandés, aclaraba que «La escritura a mano no se terminaría y, muy al contrario, se consideraba muy importante para adquirir destrezas y memoria».
En cualquier caso, el alumnado finlandés de primaria, a partir de otroño de 2016, sólo aprenderá a redactar en letras de imprenta, las que conocemos como tipográficas, algo absolutamente coherente en los tiempos que corren.
Si la idea es implementar el aprendizaje, para poder almacenar conocimientos con mayor celeridad, no podemos estar más de acuerdo.
Pero si la escritura solamente se la considera mero trámite, para identificar los tipos con los que habrán de vérselas en las tabletas, podría resultar un retroceso educativo.
Cuántas destrezas quedarán interrumpidas. La escritura es nuestra expresión gráfica, y las palabras de las y los peques son dibujos exquisitos en los que bucear, en los que conocerlas/los, entender su comportamiento e incluso encauzarlo.
Empezamos a escribir y empezamos a pensar, así desde las civilizaciones más antiguas.
La escritura actúa como testigo del gráfico de nuestra mente, por eso su cuerpo, la esbelta ondulación de los trazos, o los aplastamientos de su forma, nos delata.
Con ojo clínico o con estudio y análisis, optamos por la escritura como método de desarrollo cognitivo, reeducador, e incluso como base de datos que permita conocer e incluso anticiparse a las enfermedades de más diverso tipo, siquiátricas, neuromotoras, etc.
Cabe suponer que las autoridades de un país que afronta el asunto de la educación con tanta seriedad como Finlandia, no caerán en despreciar la escritura manual como si se tratase de una manifestación primitiva de una civilización predigital.
No lo creo; estaremos muy al tanto de lo que suceda.

Como dos gotas de agua

Vivimos rodead@s de refranes, respiramos y recurrimos a ellos, para reafirmarnos, identificar o simplificar la realidad circundante; a veces incluso demasiado. Escogiendo uno de ellos, al azar, no siempre «la experiencia es la madre de la ciencia»; con frecuencia, es la culpable del automatismo, la rutina y la indolencia.
A diario visito el parque más frondoso de mi ciudad y nunca me aburre porque no siempre es el mismo; cada momento del año, estación, hora del día, agregan matices diferentes a mi «experiencia naturalística».
Las ramas desnudas del árbol de las tulipas, con el primer chaparrón del año, lo confirman: en nada se asemejan dos gotas de agua, salvo en la composición química.
El saber popular, fuente incesante de frases lapidarias, genera enormes paradojas que repelen la realidad de las cosas.
En nuestro trabajo pericial, aunque sea de perogrullo, dos gotas de agua no son iguales; dos «n», en arcada, o en guirnalda, con uno o dos gramas, y etc, tienen su propia génesis y desarrollo, algo que, habitualmente, la persona que escribe, ni se ha parado a pensar. Pero quien falsifica, sí. Aunque esta persona sólo apreciará una escritura huérfana, no sabe ni de dónde viene ni a dónde va.
No se pueden intercambiar los cerebros ni la destreza escritural.
Dos gotas de agua, ¿iguales? Error! 😉
Un lema para escapar del automatismo y la rutina: véase lo que se vea: «las apariencias engañan».

Compartimos ese pensamiento y lo llevamos hasta las últimas consecuencias; «nada falsificado, nos es ajeno» ;.-)

Continuar leyendo «Vuelaplumas caligráfico-periciales»

El lápiz

Hace unos días, leía un hermoso cuento de Paulo Coelho sobre el lápiz*, publicado en conmemoración del «Día Mundial de Toma de Conciencia de Abuso y Maltrato en la Vejez» (15 de junio).

En el cuento, el personaje de el Viejo le explica al Niño, a travésCarrexando lapiceiras de las cualidades del lápiz, lo que desearía que éste fuese de mayor.
La «primera cualidad», en consonancia con la perspectiva religiosa del autor, repercutiría solamente sobre las personas creyentes; pero no iría en detrimento de las no creyentes, a las que se atribuirían las otras cuatro «cualidades», ya de por sí lo suficientemente potentes y determinantes como para ofrecer una lección magistral de ética personal y vital.
Ahí radica, desde mi punto de vista, la capacidad aleccionadora y el valor del cuento, que reproduzco a continuación.

http://gabinetecaligraficombc.blogspot.com.es/2014/06/el-lapiz.html

Continuar leyendo «El lápiz»

Pardo Bazán, González Serrano y la Grafología

Espacio Pardo Bazán

 
Tiempo atrás cuando llevaba a cabo una investigación sobre la escritora Emilia Pardo Bazán (1851-1921), di con un artículo “Una nueva ¿ciencia? (La grafología)”*, dedicado al libro de Sara Oquendo, una amiga de Pardo Bazán (firmado con seudónimo) titulado “La grafología simplificada; arte de conocer el carácter de las personas por su letra; teoría y práctica” que a cualquier colega le haría hervir la sangre.

 
Imaxe

En mi caso, no llegué a tal punto de ebullición -para muestra, este artículo- muy al contrario, debo reconocer que las guardias en diversas garitas me han permitido aceptar que la firmeza en las ideas siempre debe dejar una grieta que permita acceder a la duda razonable.
Como no soy devota de ningún santo (nin sequera do meu, que é o verdadeiro 😉 ) el artículo de Pardo Bazán me dio para reflexionar sobre los censuradores violentos de la Grafología, así como sobre los mercachifles esotéricos que aseveran que el futuro está en las cartas.
Coincidiendo con la autora, a la hora de demostrar la falta de rigor del opúsculo, lo que más me divierten son sus apreciaciones sobre personajes históricos fallecidos, que no hacen más que constatar obviedades; efectivamente: “para ponerles a todos ellos el rotulito, maldita la falta que nos hacía la firma”; “quisiera que estos historiadores filosóficos predijesen con certeza, no lo ya ocurrido, sino lo que tiene que ocurrir dentro de un año, o de quince días… Dada nuestra corrupción… y conociendo nuestra época mejor que las pasadas, averigüen cuánto durará Cánovas en el poder, y el cariz que presentará la cuestión social.”
Pardo Bazán, gozando de su instinto científico (que cuesta emparejar con su fe religiosa) ataca la sobredimensión de los poderes atribuidos a la grafología, por algunos “devotos”; hasta cierto punto estaremos de acuerdo.
Pero discrepamos en su intento por desacreditar el procedimiento deductivo, al que se acogieron tantas y tantos maestros de la grafología a lo largo de siglos; procedimiento, en tal caso también aprobado por las ciencias empíricas y desde luego, por la filosofía, con importantes avances para el progreso humano.
Estoy segura de que una mente preclara, como la de Pardo Bazán, miraría con otros ojos a la grafología si conociese las averiguaciones y los estudios de los últimos años, valorándola como procedimiento indispensable no sólo en procesos judiciales sino en el ámbito de la salud y la educación.
Reviví esta perspectiva de Pardo Bazán a raíz de un artículo de Mariluz Puente Balsells** sobre Urbano González Serrano (1848-1904) “El Grafismo o Grafología, la ciencia de nuestras ignorancias”, en la revista del Instituto de Ciencias del Grafismo.
Casualmente, González Serrano, destacado intelectual que formó parte de la Institución Libre de Enseñanza, era buen amigo de Pardo Bazán. Incluso sería invitado por ella a impartir sus lecciones en el Ateneo de Madrid, cuando dirigía la Sección de literatura de dicha sociedad. La amistad sobrevivió a la feroz crítica de la escritora a los Estudios psicológicos, de González Serrano (se hablará de ello en otro espacio).
Como bien resalta Mariluz Puente, formó parte de un colectivo de pensadores asociados al krausismo, a quien debemos el despegue de la enseñanza de este país, como proyecto social civilizador.
A esta Institución se le debe el interés por la enseñanza de la mujer, y de la clase obrera. Nombres ilustres como Francisco Giner de los Ríos, fundador de la ILE, o Concepción Arenal, sirvieron en las filas de la Institución.
Dos artículos de dos intelectuales muy próximos, también en el tiempo, sobre la misma materia, pero, al contrario que Pardo Bazán, Urbano Serrano se encontraría entre los defensores de la grafología como fuente de saber.
Como destaca Mariluz Puente, “Se aproxima a la grafología bajo una mirada de circunspección científica… lejos del abrazo fanático a un saber que en ocasiones muestra su lado más ridículo, fruto de un peligroso juego de asociaciones artificiales y arbitrarias de ideas, que pueden convertirla en una de esas llamadas psicologías subjetivas, parafraseando a Stuart Mill”.
Procedimiento, fuente de conocimiento e investigación, ciencia, a discutir; de lo que no hay duda es que a lo largo de los siglos, desde el abad Michon hasta nuestros días, la grafología ha sido fuente de reflexión para intelectuales y profanos.

Mónica BC

Continuar leyendo «Pardo Bazán, González Serrano y la Grafología»

Mis graffitis favoritos

Mis graffitis favoritos

Paradógico puede ser que quienes nos dedicamos a la pericia caligráfica manifestemos este entusiasmo por los graffitis.
Por activa y por pasiva, con dos «fs» o con dos «ts»; me entusiasman los graffitis siempre que sean artísticos, trazados con gusto y ubicados en el lugar adecuado. Me molestan los graffitis sucios, esbozados con torpeza, pero, sobre todo, cargados de odio y violencia, pensados con el único objetivo de molestar.Lo mismo me sucede con otras muestras seudoartísticas, que no necesariamente copan las calles, y a veces incluso gozan de público reconocimiento.

Alejo de mis devociones estos graffitis -y a esas personas- nociv@s y contaminantes (hipertrofias del ego) que alimentan el odio y la violencia.
Con razón que este tipo de objetos han sido erradicados de urbes como Nueva York, precisamente una de las cunas del género.

Disfruto, pues de estos graffitis ubicados en el lugar preciso, ensalzando lo efímero, reelaborando el sentido de nuestra cotidianeidad.

Hacía tiempo que no me recreaba con nuevas piezas como la que ahora muestro, y que «llevo a mi molino», por tener mucho parentesco con este Gabinete: casi, casi, presenta el apellido de la socia fundadora, y también su color naranja genuino de la marca.
De ahí que le rinda este pequeño homenaje.

Espero me disculpe la/el graffitera/o por la intromisión de mi «R».

Adjunto un «OXU», ya un clásico, que no veo últimamente por las calles, y que fue fotografiado hace más de un año, y que podría haber sido estampado hace dos años?

Esta sección queda abierta a vuestras fotos y aportaciones; ¡gracias!
Sección aberta ás vosas achegas; grazas!
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos.
Privacidad